23 julio, 2009
22 julio, 2009
Para tí
Y yo me sereno como el Páramo; la lluvia menuda, menuda, como una cortina de agua me lava las penas; mi fragilidad aún es como el viento que mece el Frailejón entre las brumas al caer octubre. Quizá abra caminos, nadie sabe al día siguiente lo que hará; han de ser seguros o quién sabe inciertos.
"Se que quedan amigos, con los que puedo contar para hablar de dolor.
Que existe alguien que escuche cuando alzó la voz y no sentirme sola"
Que existe alguien que escuche cuando alzó la voz y no sentirme sola"
Un humilde homenaje a quién pertenece a esa tierra bella que es Colombia. La tierra del café, de los bananos, la caña de azúcar y las flores. De Márquez, de la cumbia y un poeta.
"El coronel destapó el tarro del café y comprobó que no había más de una cucharadita, Retiró la olla del fogón, vertió la mitad del agua en el piso de tierra, y con el cuchillo raspó el interior del tarro sobre la olla hasta que se desprendieron las últimas raspaduras del polvo del café revueltas con óxido de lata." 1
"Estaba amaneciendo. La ventana se recortaba en la claridad verde del domingo. Pensó que tenía fiebre. Le ardían los ojos y tuvo que hacer un gran esfuerzo para recobrar la lucidez.
- Qué se puede hacer si no se puede vender nada- repitió la mujer.
- Entonces ya será veinte de enero- dijo el coronel, perfectamente consciente -. El veinte por ciento lo pagan esa misma tarde.
- Si el gallo gana- dijo la mujer -. Pero si pierde. No se te ha ocurrido que el gallo pueda perder.
- Es un gallo que no puede perder.
- Pero suponte que pierda.
- Todavía faltan cuarenta y cinco días para empezar a pensar en eso - dijo el coronel.
La mujer se desesperó.
" Y mientras tanto qué comemos", preguntó. Y agarro al coronel por el cuello de la franela. Lo sacudió con energía.
- Dime, qué comemos.
El coronel necesito setenta y cinco años - los setenta y cinco años de su vida, minuto a minuto - para llegar a ese instante. Se sintió puro, explícito, invencible, en el momento de responder:
- Mierda." 2
Cada Poema
Cada poema un pájaro que huye
del sitio señalado por la plaga.
Cada poema un traje de la muerte
por las calles y plazas inundadas
en la cera letal de los vencidos.
Cada poema un paso hacia la muerte,
una falsa moneda de rescate,
un tiro al blanco en medio de la noche
horadando los puentes sobre el río,
cuyas dormidas aguas viajan
de la vieja ciudad hacia los campos
donde el día prepara sus hogueras.
Cada poema un tacto yerto
del que yace en la losa de las clínicas,
un ávido anzuelo que recorre
el limo blando de las sepulturas.
Cada poema un lento naufragio del deseo,
un crujir de los mástiles y jarcias
que sostienen el peso de la vida.
Cada poema un estruendo de lienzos que derrumban
sobre el rugir helado de las aguas
el albo aparejo del velamen.
Cada poema invadiendo y desgarrando
la amarga telaraña del hastío.
Cada poema nace de un ciego centinela
que grita al hondo hueco de la noche
el santo y seña de su desventura.
Agua de sueño, fuente de ceniza,
piedra porosa de los mataderos,
madera en sombra de las siemprevivas,
metal que dobla por los condenados,
aceite funeral de doble filo,
cotidiano sudario del poeta,
cada poema esparce sobre el mundo
el agrio cereal de la agonía.
1 Inicio "El coronel no tiene quien le escriba" Grabriel García Márquez
2 Final "El coronel no tiene quien le escriba" Gabriel García Márquez
3 Poema de Alvaro Mutis
Cada poema un pájaro que huye
del sitio señalado por la plaga.
Cada poema un traje de la muerte
por las calles y plazas inundadas
en la cera letal de los vencidos.
Cada poema un paso hacia la muerte,
una falsa moneda de rescate,
un tiro al blanco en medio de la noche
horadando los puentes sobre el río,
cuyas dormidas aguas viajan
de la vieja ciudad hacia los campos
donde el día prepara sus hogueras.
Cada poema un tacto yerto
del que yace en la losa de las clínicas,
un ávido anzuelo que recorre
el limo blando de las sepulturas.
Cada poema un lento naufragio del deseo,
un crujir de los mástiles y jarcias
que sostienen el peso de la vida.
Cada poema un estruendo de lienzos que derrumban
sobre el rugir helado de las aguas
el albo aparejo del velamen.
Cada poema invadiendo y desgarrando
la amarga telaraña del hastío.
Cada poema nace de un ciego centinela
que grita al hondo hueco de la noche
el santo y seña de su desventura.
Agua de sueño, fuente de ceniza,
piedra porosa de los mataderos,
madera en sombra de las siemprevivas,
metal que dobla por los condenados,
aceite funeral de doble filo,
cotidiano sudario del poeta,
cada poema esparce sobre el mundo
el agrio cereal de la agonía.
1 Inicio "El coronel no tiene quien le escriba" Grabriel García Márquez
2 Final "El coronel no tiene quien le escriba" Gabriel García Márquez
3 Poema de Alvaro Mutis
20 julio, 2009
Mi cajita de música
Cuando estoy triste,
lijo mi cajita de música...
No lo hago para nadie,
sólo porque me gusta.
Hay quién escribe cartas,
quién sale a ver la luna...
para olvidar, yo lijo
mi cajita de música.
Amarga es la madera
del palo santo;
pero es como el amor,
que no huele y perfuma.
Cuando estoy triste,
lijo mi cajita de música.
Porque te vas y vuelves,
no he de acabarla nunca.
Te espero, mi tristeza huele a ti,
y es menuda...
Tengo las manos verdes
esta noche de lluvia.
Cuando estoy triste,
lijo mi cajita de música...
No lo hago para nadie,
sólo porque me gusta.
lijo mi cajita de música...
No lo hago para nadie,
sólo porque me gusta.
Hay quién escribe cartas,
quién sale a ver la luna...
para olvidar, yo lijo
mi cajita de música.
Amarga es la madera
del palo santo;
pero es como el amor,
que no huele y perfuma.
Cuando estoy triste,
lijo mi cajita de música.
Porque te vas y vuelves,
no he de acabarla nunca.
Te espero, mi tristeza huele a ti,
y es menuda...
Tengo las manos verdes
esta noche de lluvia.
Cuando estoy triste,
lijo mi cajita de música...
No lo hago para nadie,
sólo porque me gusta.
17 julio, 2009
Y yo lo quiero lograr
No sé si quedan amigos, o si existe el amor,
si puedo contar contigo, para hablar de dolor,
si existe alguien que escuche, cuando alzo la voz
y no sentirme sola.
si puedo contar contigo, para hablar de dolor,
si existe alguien que escuche, cuando alzo la voz
y no sentirme sola.
Puede ser que la vida, me guíe hasta el sol
puede ser que el mal, domine tus horas
o que toda tu risa le gane ese pulso al dolor
puede ser que lo malo sea hoy.
Naces y vives solo, naces y vives solo, naces y vives solo.
Voy haciendo mis planes, voy sabiendo quién soy,
voy buscando mi parte, voy logrando el control.
van jugando contigo, van rompiendo tu amor,
van dejándote solo.
Naces y vives solo, naces y vives solo, naces y vives solo.
Algo puede mejorar, algo que pueda encontrar,
algo que me dé ese aliento, que me ayude a imaginar.
Y yo lo quiero lograr, ya no quiero recordar.
Y darle tiempo a este momento, que me ayude a superar,
que me dé tu sentimiento.
Puede ser que la vida, me guíe hasta el sol,
puede ser que el mal, domine tus horas,
o que toda tu risa le gane ese pulso al dolor,
puede ser que lo malo sea hoy.
Algo puede mejorar, algo que pueda encontrar,
Algo que me dé ese aliento, que me ayude a imaginar.
Y yo lo quiero lograr.
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