30 noviembre, 2009

Para ti, directo al corazón

La vida no es sendero suave, no, es un camino hecho de piedras y ásperos recodos, altas cuestas y duros descensos. Muchas veces vamos a caer, sí, infinidad de veces, pero en nosotros está la fuerza para levantarnos y seguir. No importa cuantos raspones y heridas nos hagamos en el camino para llegar a alcanzar nuestros sueños, lo importante es nunca dejar de tenerlos y hacerlos realidad.
Hace poco, exactamente el viernes recibí una noticia que me dejo un poco desorientada, triste e insegura... A menudo piensas que ciertas cosas están resueltas en tu vida y casi ni te preocupas por ello, pero resulta que hay una gran verdad: "nunca des nada por seguro", siempre ten una alternativa por si algo sale mal. Por un momento lloré, me desesperé, enmudecí y pensé lo injusta que era la vida conmigo, por qué me sucedía esto a mí, que era la que siempre había estado allí en las buenas y en las malas. En realidad me sentía bastante mal, y de pronto... aparece alguien y con su ternura me hizo olvidar el mal rato... entonces te das cuenta de que a menudo no le das el debido valor a las cosas, yo cuento a la distancia con gente maravillosa a la que puedo llamar MIS AMIGOS, y le doy gracias a la vida por ello. Está persona me recordó que las cosas bellas siempre están ahí, solo que en nuestro afán olvidamos que nunca esta todo perdido, que siempre hay una luz; bella, hermosa, que jamás se apaga. Pero no la busques fuera, búscala dentro de ti.




Empieza una temporada muy difícil para mi, en el camino muchas veces querré detenerme y no continuar, abandonarlo todo y echarme a llorar por los rincones lamentando mi suerte. Pero el tiempo de los lamentos es una página cerrada, soy yo quien labro mi futuro. Lo pasado, en el pasado queda, seguiré adelante porque ahora tengo metas, sueños que lograr y los tengo a ustedes, lo mejor que la vida me ha dado en mucho tiempo.

21 noviembre, 2009

Diario de un sueño II

Les ruego pongan la música antes de empezar a leer, es "El cóndor pasa", melodía mundialmente conocida y pertenece al compositor Daniel Alomías Robles.

Nos quedamos en el día 03 de noviembre rumbo a la ciudadela de Caral, Don César no esperaba puntual y tuvo la gentileza de esperarnos mientras merendamos algo antes de partir. El camino es un poco difícil, solo tierra asentada. Pero vale la pena el viaje, llegar a una de las primeras civilizaciones del mundo, con 5,000 años de antigüedad; dada a conocer gracias a la arqueóloga peruana Ruth Shady y declarada Patrimonio de la Humanidad en junio del 2009. Formada por nueve pirámides truncas, la guía nos contó que aún está en proceso de excavaciones se calcula que existan unas 32 más por descubrir. Se sabe que era una civilización que vivía a base del trueque con otros pueblos, pero todos pertenecían al mismo gobierno. No han hallado armas para luchar, más si para cazar. Tenían una economía mixta basada en la agricultura y la pesca.


Lugar donde se hacían las ofrendas en Caral

Bueno, todo estupendo, hasta que tuvimos que emprender el viaje de retorno a Lima, las 4 horas se convirtieron en casi 6... no sabía que yo padeciese de algún tipo de claustrofobia, pero por la hora había un congestionamiento horripilante y en verdad, era muy estresante. Dentro del bus estaban pasando una película que era toda violencia (muy oportuna para un viaje) y al asomarse por la ventanilla, oscuridad y autos... lo peor es no saber bien dónde estaba, no quería ni mirar a mis amigos, me imaginaba que como yo estarían con ganas de saltar por la ventana. La primera avenida que reconocí como céntrica nos bajamos, casi, casi me tire del bus; que sensación de alivio.
Y el bello Barranco de nuevo, nuestro lugarcito y nuestras charlas. Y a bajar las fotos que habíamos tomado de la ciudadela. Mañana sería un día maravilloso para ellos, viajarían a Macchu Picchu (eso ya le corresponde narrarlo a Julio César).

Viernes 06 de noviembre: Escapándome de nuevo del trabajo para recogerlos del Aereopuerto y de allí marcharnos a su nuevo alojamiento, está vez en Miraflores, este es otro de los distritos más bonitos de Lima. Pero eso sí, no tiene ese encanto de Barranco, es más concurrido y comercial. Nos dimos una vuelta con el Mirabus (un autobus de dos pisos, el segundo está libre para que las personas, sobretodo los turistas puedan apreciar mejor los lugares), te da un paseo de unos 30 minutos por los lugares más representativos de Miraflores, San Isidro y un atisbo de Barranco.

Mirabus

Siempre un Metro a la mano (no es propaganda), y a abastecernos de cosillas para comer y beber mientras seguíamos con nuestra charla en una improvisada "sala de estar" echa por César. Y a mí que cada vez me costaba más separarme de ellos porque sabía que ya pronto partirían.


Fuente en Plaza de Armas de Miraflores

Sábado 07 de Noviembre: Ahora veríamos al Gatito en su performance de nadador, debo decir que por está época las playas están desiertas, la temporada de verano empieza a inicios de enero y se prolonga hasta fines de marzo, incluso parte de abril. Pero allí estábamos César y yo dispuestos a darle el gusto a nuestro amigo de zambullirse en el mar. Las playas (si no tienes auto), son un poquitín difíciles de acceder, hay que bajar por una especie de camino muy inclinado y echar mano... pues, de las manos y asentar bien los pies de lo contrario podías tener un aterrizaje no muy agradable (este lado de las playas es de las denominadas "canto rodados", es decir, pura piedra, piedrita y demás).

Imaginense una bajadita por allí, entre el verdor... y luego cruzar la pista a lo loco.

Finalmente llegamos a un lugar adecuado, luego de darnos un remojón hasta las pantorrillas sin querer queriendo. Y allí estuvo nuestro Gatito jugueteando en el agua. Ambos son bastante sensibles al sol... no quiero ni imaginármelos en los meses en que alcanzamos los 30º C. Allí nos quedamos disfrutando de un sol que ya empieza a enseñorearse de los días y esperando a secarnos y que nuestros calcetines lo hicieran también, mientras observábamos al Gato sentado a la orilla dejando que las olas jugasen con él a su antojo, no sé, me daba ternura verlo, era como un niño. Ambos eran como mis niños, se me salía a raudales el instinto de madre que todas las mujeres llevamos dentro.
Luego a subir la empinada cuesta de nuevo y volver al alojamiento a desparramarnos literalmente por donde fuera. Una merienda ligera... y de nuevo a coger un bus, era el momento de empezar a comprar los recuerdos para la familia y amigos. Julio César comparte el mismo cariño que yo por los animales, así que estaba encantado con unas llamitas hechas de lana de alpaca... y el tiempo se pasaba pensando si esto sería bueno para mamá, papá o la amiga o amigo del trabajo. Al regresar me esperaba una bella sorpresa, me dieron unos obsequios de su patria hermosa y uno de mí querido Sergio, el retrato de la Mona Lisa ni más ni menos; todo un lujo tenerla en casa. Y mañana, mañana sería el día triste en que este sueño llegaría a su fin y tendría que verlos partir y con ellos esas pinceladas de color y alegría que le pusieron a mis días.

Domingo 08 de Noviembre: El vuelo salía a las 11:10 am. Así que a las 10:30 am. estaba con ellos para acompañarlos y despedirlos... pero oh Dios, el horario no se leyó bien, no era a las 11 sino a las 10... "volamos" hasta el aeropuerto, pero ni con todas las prisas se pudo alcanzar el vuelo. No quedaba sino pagar la penalidad y esperar el próximo que salía como a las 9:00 pm.
Me los llevé a casa, finalmente pudieron conocer a mi familia y mi verdadera "casita". Nos dio tiempo para que visitaran Plaza San Miguel, un centro comercial importante y muuuuyyy concurrido de la zona y por primera vez, comer comida "chatarra". Y ver una exposición de dibujos humorísticos sobre consciencia ecológica, con expositores de todas partes del mundo. De nuevo una morena, la última que beberíamos juntos y la conversación que nunca se nos terminaba. De vuelta a casa, a ver las fotos que tiene Julio César por centenares de los diferentes lugares que ha visitado. Un verdadero placer verlas. Y el tiempo que volaba, ya eran las ocho, ahora si era el adiós definitivo. Un taxi, con un taxista muy divertido, que justo había vivido un tiempo en Colombia... esas casualidades.
El sueño terminaba, un abrazo fuerte, un deseo de que vuelvan pronto, la puerta de cristal se cerró tras ellos. Me quede unos instantes observando de que todo estuviera correcto, cuando los vi salir tranquilos rumbo al segundo piso, sabía que todo iba bien. La noche era fría, me arrebuje en mi abrigo y me di la vuelta. La realidad caminaba de nuevo a mi lado con su andar lento y desdibujado.

"Que aquello que ha nacido libre viva por siempre en libertad"






Gracias a:

Martín Palma, Janiffer Juárez y José Ramos, mis jefes, que me brindaron esos 2 días de licencia.
Patty Otoya, que me oriento e hizo los contactos para todo lo relacionado a Caral.
Mauro Saona, mi tío, que también se encargo de contactar a alguien que los ayudara en Cusco.
Willy Saona, mi hermano, que gentilmente me cedio su cámara fotográfica.
Alex y Jonathan, mis sobrinos por elección, quienes se encargaron de la casa y los animalitos en los días que no podía hacerlo.
Patty Panizo, por su cariñosa comprensión para escucharme todo el rollo cuando volvía de nuestros paseos.
María Esther, quién como arquitecta me dio algunos consejos de dónde llevarlos (lástima que el tiempo quedara tan corto)

Gracias a todos ellos por su ayuda, que difícil hubiera sido todo sin su comprensión, sus consejos, su apoyo... en fin, GRACIAS.

17 noviembre, 2009

Balada para un sueño


La semana empieza y con ella mis ansias han de dormir hasta que llegue su muerte y empiece mi vida. Deshojar los días hundido en el trabajo para distraer las horas y no pensar tanto en ti. Felizmente la sabiduría me acompaño cuando decidí mi carrera, amo mi trabajo de lo contrario todo sería en vano; que tristeza el tener que hacer algo para sobrevivir, pero sin pasión, sin alma, sin corazón. Si no tuviera esto sería aún más difícil el soportar los días en que no te tengo a mi lado... Pero están esos momentos en que el corazón se me alegra cuando escucho tu voz del otro lado del auricular y hablamos y hablamos como si el tiempo no nos fuera a alcanzar... en verdad nunca es suficiente.
Pero finalmente llega el sábado, oh, cuantos motivos tengo para esperarte Sábado mío, me llenas la vida, todos los relojes suenan al albear; la sonrisa se me prende en los labios y no me abandona más. Sábado mío, siempre eres pretexto para escribir un poema; parece que la naturaleza entera sale a saludarme, es como si contigo se fueran todas las tristezas y siempre fuera primavera. Y esta mi sed de tenerlo entre mis brazos no supiera ya de esperas.
Amado mío verás crecer la vida con mis manos cuando alcance ese sueño que yo abrigo desde hace mucho, ese sueño que ya conoces y compartes y el tiempo sea un eterno sábado enamorado.
Las horas vuelan como pompas de jabón cuando estallan multicolores al tocarlas; los paseos, las charlas, las caricias disimuladas y las ansias que nos devoran por volar al lecho que nos espera. Suave y fragante, tibio y eterno.
Disfrutamos tanto, tanto cada segundo cada hora; y gozo tanto, tanto cada parte de tu cuerpo y los guardo en mis rincones todos, para que así me duela algo menos cuando partas, porque aquí te me quedas de algún modo.
El día va muriendo y nace un domingo, un domingo que conforme avanza me va dejando un sabor amargo en la garganta. No hablas mucho, pero tus manos y tus labios tienen un lenguaje propio que viertes con transparente tinta sobre mi piel. Tu amor no es de palabras está hecho de dulces detalles, de ternura pura.
Te veo en la ventana, ni siquiera te he sentido levantarte, te desperezas suave, sigiloso. No te muevas, quiero conservar este instante así, tú junto a la ventana como a contraluz, yo echado en el lecho, queriendo mirar los ojos profundos del sol detrás de tu cuerpo denudo, desnudo y feliz, ya es el día en que debes marcharte. No te muevas, si puede estar quieta la felicidad, si puede volverse de piedra el amor; convierte en estatuas los días y el mar... y yo me conforme porque vas a partir. No te muevas, y dime si hay tiempo para dormir, en unas horas me esperan los días que quiero olvidar. Vuelve a mis brazos a este reclamo de amor que despierta de nuevo, te retengo fuerte y como un niño invento mil tretas para retrasar tu partida... Pero debo dejarte ir, pintarme una sonrisa en los labios, unas ganas de reír que ya no siento, y pongo nuestra canción favorita, nuestras horas de amor, casi divinas, es mejor despedirlas con un canto.
Y aquí me quedo enredado entre las sábanas, sintiendo aún tu calor, tú aroma. Aún me arden tus últimas caricias en la piel, la humedad de tus besos en mis labios. Tu aroma llena está soledad que amenaza con abrazarme, más yo la aparto de mi lado, porque en la cama tu silueta aún está grabada llenando el espacio en que no estas. Cierro los ojos y pienso amor mío, eres la mano que quiero siempre entrelazada a la mía.
Ha de llegar el día en que no haya más separaciones, y el tiempo sea un eterno sábado enamorado.






Gracias a Silvio, por sus palabras, por sus canciones.

14 noviembre, 2009

Diario de un sueño

"Se me ha dormido un sueño en el café, vencido por una promesa de pronto volver". Retornaré a las calles de Barranco, que ahora tienen otro sonido, otro aire y volveré a revivir las noches y los días deshojando ideas, sueños y recuerdos en un tranquilo parque, frente al mar o en un pintoresco restaurante. Quiero echar la vista atrás y volver a pasear por los lugares que recorrimos juntos.

Domingo, 01 de noviembre: Luego de que Patty me recogiera de casa, la amiga que me acompañaría a recogerlos del aeropuerto, iba alegre y nerviosa, finalmente el gran momento se acercaba. Llegamos cuando ya estaban en el área de llegada de vuelos internacionales. Una mirada de reconocimiento, un abrazo, unas sonrisas, no hacía falta más. Y arriba el sol brillando como no hacía en mucho tiempo y de allí a Barranco donde estaba el alojamiento que habían reservado, un sitio agradable (una semana antes lo había ido a visitar para ubicarme y reconocer el lugar). Este fue el inicio de una de las aventuras más felices de mi vida. Dejaron su equipaje y marchamos a conocer los lugares más representativos de Barranco. Teníamos hambre, pero aún era temprano y no habían muchos restaurantes abiertos, así que un paseo nos venía bien; por suerte nos topamos con una feria de comida y dulces criollos... su primer contacto con nuestra comida típica, "un suspiro a la limeña". Luego el descenso a la "Bajada a los baños ", otrora a principios del siglo XX un centro de diversión para la crema y nata limeña. Nuestro gato disfruta mucho del agua y ya ansiaba zambullirse en nuestro tranquilo mar, pero lo pospusimos para más adelante. Conocieron "La Ermita", antigua capilla de pescadores y viajeros.

La Ermita

Bajada a los baños

Paseamos por "El puente de los suspiros", construido en 1876 e inaugurado el 14 de febrero, déjenme citarles unos versos que le dedico Chabuca Granda:
"Puentecito dormido
y entre murmullo de la querencia,
abrazado a recuerdos,
barrancos y escalinatas.
Puente de los suspiros
vengo a que guardes
en tu grato silencio
mis confidencias.
Es mi puente un poeta que me espera
con su quieta madera cada tarde
y suspira y suspiro
me recibe y me deja
solo sobre su herida su quebrada"
y este desemboca en el pasaje que lleva el nombre de la autora, nacida en este distrito.

Después de unas horas todo empezaba a cobrar vida, las tiendas perezosas por las jaranas de la noche anterior (día de la canción criolla) recién empezaban a abrir sus puertas. Y nosotros a conseguir un lugarcito tranquilo para saborear el ceviche y la tan promocionada cerveza cuzqueña y el pisco sour, creo que no quedaron defraudados.
Luego tomamos un taxi para llegar a tiempo y visitar la Huaca Pucllana, ubicada en pleno centro de Miraflores. Debo decir que es una de las mejor conservadas de las que se levantaron a lo largo de la costa limeña. Las huacas eran centros religiosos de las primeras culturas surgidas en la zona y también lugares donde se depositaban ofrendas. El paseo fue bastante instructivo. Luego coger un bus para llegar hasta Larcomar, (Julio César había visto las hermosas torres que son el distintivo del lugar y quería visitarlo) es un centro comercial orientado casi exclusivamente para el turismo, con una preciosa vista al mar repleto de bonitas y elegantes tiendas. Y la charla seguía, como siempre acompañados de nuestra cerveza morena. Saben, comprendí que el hogar no son cuatro paredes, el hogar está donde te sientes a gusto, querido, y puedes pasarte horas de horas charlando y el tiempo es lo que menos importa.

Huaca Pucllana y perritos peruanos sin pelo

Larcomar, al fondo se ve una de las torres de las que les hablaba

De vuelta a Barranco, es estupenda la capacidad de orientación de Julio César, creo que el termino guiándonos a todos, porque yo soy super desorientada. Teníamos todo a la mano; farmacias, locutorios, restaurantes, casas de cambio y Metro (supermercado) que se convirtió en nuestro centro de abastecimiento para todo lo que hiciera falta. Más charlas amenas y a casa... Esta rosa siempre llegaba como la cenicienta, antes de dar las doce campanadas.

Lunes 02 de Noviembre: Julio César tenía una entrevista con los representantes de la Facultad de Educación de La Pontificia Universidad Católica de Lima; así que los planes se retrasaron hasta las 2:00 pm. Nuestro destino era ahora el Centro histórico de Lima. Palacio de Gobierno, a secas, aquí no tiene ninguna denominación en especial. La Plaza Mayor y su hermosa fuente central y claro tenían que conocer la Basílica de la Catedral de Lima y todos los tesoros que guarda; valiosas pinturas, tallados preciosos en madera, galerías con exposiciones especiales. Y luego me los lleve a la Iglesia de San Francisco, cuyo principal atractivo son las denominadas catacumbas (espacios subterráneos donde se enterraban a los sacerdotes de la orden de los franciscanos) actualmente apenas si son 30 los que continúan al servicio de esta orden. Hay galerías muy bellas, pero por desgracia están expuestas a la humedad y muchos de los artesonados de madera de cedro han sucumbido al paso del tiempo, los elementos y una inadecuada conservación.

Plaza Mayor, al fondo Palacio de Gobierno

Frontis de la Basílica Catedral de Lima

Iglesia de San Francisco

Luego nos fuimos a dar un mini recorrido por el Jr. de la Unión, otro conglomerado comercial y de nuevo a nuestro Barranco. Conversaciones acompañadas con nuestra "morena", los mentolados y la noche fría, pero para mis amigos que vienen de un clima menos benigno, era perfectamente soportable. Las noches son nubladas por esta temporada y en vano buscábamos estrellas en el cielo, apenas si hallamos una, tímida y solitaria titilando sobre el oscuro manto; me imagino que el cielo de Bogota ha de ser muy bello por las noches. Tendrían que ver nuestro cielo en los meses de verano, completamente estrellado.
Le habíamos tomado gusto a un Café acondicionado dentro de un vagón antiguo, este se convirtió en nuestro lugarcito para una merienda ligera o un tinto (café fuerte sin azúcar). Y de nuevo a casa rayando las doce. Ya me sentía una especie de Sherezade, solo que era yo la que se entusiamaba con las conversaciones de Julio César y era una lástima interrumpirlas antes del nuevo día.

Martes 03 de Noviembre: 6:20 am. destino, la Ciudadela de Caral, teníamos que coger el bus de las 7:00 que nos llevaría a Barranca, allí nos esperaría Don César para llevarnos al mismo Caral (que está como a una hora de la Plaza de Armas de Barranca)... llegamos a la terminal con las justas, ya partía el bus de esa hora y no podíamos retrasarnos. Luego serían cuatro horas de viaje hasta llegar a Barranca, durante el viaje no hay mucho que ver, una vez se sale de Lima ciudad, el resto es solo desierto y más desierto. Formaciones rocosas o de arena erosionados por el viento y del otro lado el mar; esta es una extensión que forma parte de la Carretera Panamerica denominada "Pasamayo" y de trecho en trecho algun poblado. Como ven en la foto, durante el viaje de retorno el auto va pegadito al precipicio... "de pelos" como diría Bart.

Desierto

Pasamayo, pegadito al abismo como les dije

Continuara...


Les pongo fotos de internet como referencia, el turuleco (así le digo de cariño) de mi hermano reside en Huaral y no tiene cuando enviármelas, pero les prometo que en cuanto me las envíe, haré una galería exclusiva de ellas.

11 noviembre, 2009

Nostalgias

Pronto les estaré contando sobre los maravillosos días que pasé junto a mis queridos amigos colombianos. La cosa se me ha puesto color hormiguita, pero este sábado publicaré nuestras aventuras. Y es que mi hermano no tiene cuando enviarme las fotos... y como la cámara era suya. Otra cosa en mi lista de pendientes URGENTES, comprarme una.

Llegando al trabajo con todo el entusiasmo del mundo. ¡Vivan los balances, cotizaciones, estados financieros y demás yupiiii!

En el trabajo, con una organización envidiable.

Saliendo del trabajo, fresca como una lechuga rumbo a las clases.