Remiendos

Hay ocasiones en que los remiendos que llevó en el corazón empiezan a descoserse, entonces es necesario parar unos instantes y volver a zurcirlos... porque de lo contrario ya no podría seguir.

Hace un año ya que los acompaño, llegue de la manera atolondrada, tan propia de mí forma de ser, olvidando la contraseña y teniendo que volver a crearla.

Durante este tiempo he volcado mi corazón en este espacio y he tenido la dicha de leer en los suyos... y me sentido muchas veces tan feliz y acompañada como si este fuera finalmente mi lugar, el que siempre he buscado.

Yo no puedo irme de la montaña, porque los quiero demasiado... porque en cada palabra que he escrito les he mostrado mi lado luminoso y mi lado oscuro.

Tengo que recuperarme... está rosa esta queriendo marchitarse, pero yo no la voy a dejar.

El médico dice que en un par de semanas me voy a sentir mejor. Yo voy a seguir a pie de la letra todas sus indicaciones, porque quiero estar de nuevo con ustedes... al pie de la hoguera, hablando de nuestros amores imposibles, de nuestros sueños, de nuestras alegrías... quiero estar SIEMPRE CON USTEDES.

Un beso y hasta siempre.