04 octubre, 2006

En el Dia Internacional de los Animales


Callejero
Era callejero por derecho propio
su filosofía de la libertad,
juegan a las suyas sin atar a otros
y sobre los otros no pasar jamás.
Aunque fue de todos, nunca tuvo dueño
que condicionara su razón de ser,
libre como el viento era nuestro perro,
nuestro y de la calle que lo vió nacer.
Era un callejero con el sol a cuestas
fiel a su destino y su parecer,
sin tener horarios para hacer la siesta,
ni tener que darle cuentas al amanecer.
Era nuestro perro y era la ternura
que nos hace falta cada día más,
era metáfora de la aventura
que en el diccionario no se puede hallar.
Era nuestro perro, porque lo que amamos,
lo consideramos nuestra propiedad,
y era de los niños y del viejo Pablo
a quien rescataba de su soledad.
Era un callejero, y era un personaje
de la puerta abierta en cualquier hogar,
era en nuestro barrio: como el paisaje,
el sereno, el cura y todo lo demás.
Era el callejero de las cosas bellas,
y se fue con ellas cuando se marchó,
se bebió de golpe todas las estrellas
se quedo dormido y ya no derpertó.
Nos dejo el espacio como testamento
lleno de nostalgia, lleno de emoción,
vaga su recuerdo por los sentimientos,
para derramarlos en está canción.
Este es Pancho, y es mi amigo; y lo quiero mucho, a pesar de que no es del todo mío, porque sé que me quiere, pero sé también cuanto ama su libertad. El llega a mi casa al atardecer y se marcha cada mañana, y en cierta forma creo, que es así como debe ser.

Solo espero que no "se beba las estrellas de golpe", demasiado pronto, porque es un buen amigo, y todos quisierámos que los amigos nunca se marchen de nuestro lado.

Un saludo para Sombrita y Mosquito; y para todos aquellos que tengan una mascota al lado, ellos son la ternura que siempre nos hace falta.

Gracias a Alberto Cortéz, por está hermosa canción.

9 comentarios:

Ana desde el Sur del Mundo dijo...

Para empezar te diré que ésta canción, indefectiblemente, me hace llorar, me lleva muuuuuy lejos en el tiempo, a más de 26 años atrás, me hace sentir a mi vieja, el aroma de la casa de mi infancia... la melancolía de una época preciosa, "años dorados" como me dijo nuestro Alado Amigo y por tanto, momentos para atesorar en el corazón. Así que por este emotivo recuerdo, GRACIAS!

Por nuestra parte, en Argentina, celebramos el día del animal el 29 de abril cuando se homenajea al doctor Ignacio Lucas Albarracín, incansable luchador por los derechos de los animales, oriundo de San Juan. Su fallecimiento se produjo el 29 de abril de 1926 y por eso, por iniciativa de la Sociedad Protectora de Animales, se eligió este día para conmemorar el "Día del Animal".

Y finalmente ¡saludos! a las mascotas de todoooodos, a Sombrito y Mosquito por supuesto y a mi Pepper que es un verdadero Amigazo.

Besotes Rosa!!!

Da Vinci dijo...

Yo tengo un pequeño zoo en casa. Dama es un miembro más de la familia, una caniche enana de color negro y ya muy viejita, 15 años, cualquier día nos da un disgusto. Diez peces de colores en un estanque, un conejo de indias, un pajarito tropical y toda la fauna que entra, sale, anida y se alimenta en el jardín. son todos respetados, amados y bienvenidos.
No se si aqui, en España hay un día dedicado a los animales, a no ser que el día de San Antonio Abad, que es cuando los bendicen, sea considerado como tal.

De cualquier manera, los tenemos que respetar y cuidar.
Un fuerte abrazo.

Posdata/ he recibido tu invitación, pero no se como funciona.

Rosa dijo...

Como sabes, Francisco de Asís, era una persona que amaba a los animales. Por eso el día 4 de octubre, fecha en que falleció se celebra el Día Internacional de los Animales.
En cuanto al correo, mi querido amigo, pues lo que estoy tratándo es de crear mis links, pero no sé cómo hacerlo.

Un beso

Ana desde el Sur del Mundo dijo...

Ya me parecía que había un error!!!
Me llegó la invitación para colaborar con tu página... como un miembro más... este es tu espacio... arreglemos el desguise...
Rosa, por favor, mandame un e-mail y veamos estas cosas en un ámbito más "privado" ja ja ja!!! No me parece correcto dejarte estos mensajes dentro de un post, pero no tengo manera de hacer contacto con vos.
Te mando un beso grande.
Ana

Dalia dijo...

Que lindo!!!! me gustó mucho RosadeFuego, a mi también me encantan los perros.

Jamás voy a olvidar a mi querido Roger, aun sueño con él y con lo tanto que me quería. Los perros deberían vivir tanto como nosotros, es muy triste cuando se van.

Dalia dijo...

A mi también me llegó el correo, suerte con los links amiga, yo nunca supe por donde se hacían y los terminé haciendo por la Plantilla con el código HTML :(

Alas dijo...

Ayyy mi Rinti (Rintintín), fue envenenado para Semana Santa porque era el guardián de nuestro pasaje y muchos querían sacárselo de encima. Tenía cicatrices de mil batallas y yo solía llamarlo desde la puerta, porque sabía que donde quiera que estuviese, vendría corriendo hacia mí...

Mi Rinti se bebió de golpe todas las estrellas una noche de abril. Mientras en la televisión transmitían películas épicas, yo miraba por la ventana y veía como las patas se le doblaban por el dolor, observaba a mi tía (que vivía enfrente) y a algunos del barrio, intentando hacer que el pobre bebiera leche, sin conseguirlo. Ya no había remedio.

Me enteré luego, que los hombres se lo llevaron al río (el Mapocho, que pasaba muy cerca), para terminar con su sufrimiento. Les hice una pataleta a mis padres, les imploré que los detuvieran, pero nada...

Al día siguiente, mi hermano y yo, más nuestros vecinos Rodrigo y Juan Carlos (hermanos también), nos unimos para convertirnos en la pandilla de rescate. Nos parecía una estupidez que hubiesen intentado apurar su muerte si de igual manera tenía que sobrevivir, así es que salimos a buscarlo por toda la rivera.

El Rinti había aguantado mil riñas y otros intentos de envenenamiento, por qué ahora iba a ser diferente...

No lo encontramos, pero tampoco lo vimos muerto, así es que acordamos en que se lo llevó la corriente y alguien lo rescató. De igual manera, por las dudas, hicimos unas cruces con ramas y le rezamos un Padrenuestro...

Nunca en mi vida había sentido lo que era una pérdida, hasta mi callejero...aún se me nublan los ojos al recordar todos los días que siguieron, donde cada mañana salía a la puerta a gritar su nombre, por si había vuelto...

Rosa dijo...

Hay alas, mira que me has hecho un nudo en la garaganta. Tú Rinti, morir así, por la crueldad de la gente. Ay, por Dios, si me están rodadando lágrimas por las mejillas, que triste me has puesto.

Yo no quiero que mi Pancho temine así. Si vieras la de veces que me "pelee", con otros perros para recatarlo. Yan van tres veces que he ido a parar a emergencias por esto. Pero yo lo quiero, y ... así soy yo.

Alas dijo...

Lamento haberte contagiado mis lágrimas mi querida Rosadefuego, te prometo que no me di cuenta cómo fue saliendo ese recuerdo tan doloroso de mi pecho y es que cada vez que oigo esa canción, pienso que sólo falta su nombre ahí...

A tu Pancho no le va a suceder lo mismo, tu Pancho tiene te tiene a ti y eso lo hace un perrito muy afortunado...no pienses más en eso, por favor...un abrazo inmenso y perdóname otra vez...